Las condiciones inhóspitas del círculo polar ártico esconden un paraíso para todo aquel viajero que busca aventura, naturaleza salvaje y destinos inaccesibles. Quien se atreve con Groenlandia (Dinamarca) pronto se ve recompensado con paisajes y experiencias de viaje que difícilmente se repiten en otras partes del planeta.
Cómo viajar a Groenlandia
Preparar un viaje a Groenlandia no es tarea sencilla. Las inexistentes conexiones por carretera nos hacen depender de vuelos y barcos, lo que dispara el presupuesto. Al planificar la ruta hay que estudiar las combinaciones aéreas y jugársela con las condiciones climatológicas, que incluso en verano pueden no ser agradables. La ropa y el equipamiento necesario para actividades al aire libre también requieren cierta investigación previa. Imagina un viaje al norte de los países nórdicos o Islandia, pero mucho más salvaje.
Si vas por tu cuenta, la planificación se complica muchísimo, pero tampoco es recomendable dejar todo en manos de una agencia y aceptar cualquier paquete que nos ofrezcan. Hay que elegir qué se quiere visitar, qué tipo de viaje y con qué presupuesto se cuenta (aunque no será escaso para este viaje).
¿Es posible viajar por tu cuenta a Groenlandia?
Sí, pero puede que no sea la mejor idea para conocer en profundidad la isla más grande del mundo (considerando Australia y Antártida como continentes). La libertad de ir sin agencias en Groenlandia, podría acabar limitando la experiencia general del viaje.

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Quien elige Groenlandia como destino busca disfrutar de naturaleza virgen, de largas caminatas entre montañas, vistas espectaculares, auroras boreales, travesías entre fiordos, rutas en kayak, trineo de perros, descubrir asentamientos aislados y conocer la cultura de los pueblos inuit.
Nuuk, una breve introducción a Groenlandia
En caso de ir por tu cuenta, podrías volar hasta Nuuk, la capital. Unos días en la ciudad más poblada de Groenlandia dan para captar la combinación entre naturaleza, vida salvaje y adaptación a las duras condiciones de vida.
El Museo Nacional, en el antiguo barrio de pescadores, es una visita imprescindible. También lo es comer alguna especialidad local como hamburguesas de buey almizclero, goulash de ballena o suassat, un contundente plato de estofado de foca.
El contacto con la vida salvaje desde Nuuk, más allá de contemplar las montañas y fiordos que la rodean, se completa con un tour para ver ballenas o excursiones hasta icebergs. Además hay dos montañas próximas con senderos perfectos para caminar en verano: Quassussuaq y Ukkusissaq. Sobra decir que las vistas a Nuuk entre fiordos y montañas merecen este esfuerzo, pero si quieres comprobarlo por ti mismo desde casa, el equipo de Google Street View ya ha pateado estos senderos.
¿Qué asentamientos visitar en Groenlandia?
Aunque hay cientos de lugares recomendables, la limitación de tiempo y presupuesto habitualmente lleva a sentar base en Nuuk y desde allí volar hasta algún otro asentamiento. La mayor parte se concentran en la costa sur y suroeste, donde las temperaturas facilitan un poco más la vida local todo el año y al viajero, su estancia durante primavera o verano.
Para que te organices, los siguientes tienen aeropuerto o helipuerto:
- Sur: Nanortalik, Itilleq, Qaqortoq, Narsaq y Narsarsuaq.
- Suroeste: Sisimiut, Sarfannguit, Maniitsoq, Kangerlussuaq y Nuuk.
- Suroeste, alrededor de Disko Bay: Qeqetarsuaq, Aasiaat, Ilullisat, Qasigiannguit y Kangaatsiaq.
Cómo moverse en Groenlandia
A pesar de su enorme superficie, los viajes por Groenlandia suelen seguir una ruta definida con base en determinados asentamientos. Estos se encuentran en la línea de costa, y tras el deshielo, es posible acceder a ellos a través embarcaciones, tours o barco-taxis que acercan al visitante hasta otros pueblos y puntos de interés cercanos.
En cambio, para recorrer grandes distancias la única forma de transporte es el avión (o helicóptero). Las calles están asfaltadas en los principales asentamientos, pero no esperes encontrar carreteras que comuniquen un pueblo con otro, más allá de unos cuantos kilómetros pavimentados. Recuerda que, salvo en los meses de verano, el hielo cubre todo y las carreteras se vuelven innecesarias. Tampoco tiene mucho sentido levantar carreteras en una geografía tan accidentada y sin apenas población a lo largo de miles de kilómetros de distancia. Y en cierta forma, es de agradecer, pues así se ha respetado la naturaleza virgen de Groenlandia.
La web de Air Greenland ofrece vuelos regulares que conectan un punto con otro de la isla. No está de más echar un vistazo a las conexiones existentes antes de viajar.
Cuándo viajar a Groenlandia
Sus bajísimas temperaturas y sus oscuros meses de largo invierno no inspiran demasiado. Así ocurre de diciembre a marzo. La primavera y el otoño suceden muy deprisa en el Ártico, son meses recomendables para disfrutar de una auténtica experiencia ártica, con paisajes nevados, primeras navegaciones entre icebergs, transporte en trineo y auroras boreales más frecuentes. Luego el verano se extiende desde finales de mayo hasta finales de septiembre, con sol de medianoche y mejores temperaturas (hasta superan los 15 grados).
Cómo llegar a Groenlandia
Hay vuelos directos a Groenlandia desde Dinamarca e Islandia. Los precios son elevados, superando fácilmente los 600 euros por un trayecto de ida y vuelta. Desde Islandia, puedes buscar tu conexión en la web de Air Iceland Connect y desde Dinamarca, en la web de Air Greenland. Además, hay varios cruceros que desde Canadá, Estados Unidos y Europa hacen parada en Groenlandia.
Antes de viajar a Groenlandia…
Aunque es un territorio autónomo de Dinamarca, en 1985 dejó de ser parte de la Unión Europea. Por tanto, para viajar como turistas los europeos no necesitamos visado, pero sí el pasaporte con tres meses de validez.
Deberías considerar que no solo el billete de avión es caro, también el alojamiento y los gastos diarios del viaje. Piensa en 3 veces más presupuesto por día que en un viaje en España. La moneda oficial es la corona danesa. Para evitar quedarnos sin efectivo sería conveniente llevar coronas desde casa o cambiar nuestra moneda en los aeropuertos en los que hay que hacer escala, como en el de Copenhague, donde Global Exchange dispone de oficinas. ¿Quieres saber cómo? Sigue leyendo.
¿Dónde puedo cambiar moneda en Dinamarca?
Global Exchange cuenta con 260 oficinas en 21 países. En Copenhague, tendrás la posibilidad de hacerlo en el Aeropuerto Internacional de Kastrup, aunque también podrás hacerlo en el de Billund.
Y si ya estás allí o planeas cambiar dinero a tu llegada (o a tu vuelta a casa), te lo ponemos más fácil con un descuento del 15% sobre el margen aplicado a tu cambio en cualquiera de sus oficinas en Dinamarca. Para beneficiarte de este descuento, imprime y recorta este cupón y comienza tu viaje con una pequeña alegría.